Reportaje- Evelyn Sofía.

Qué tienes tú que no tengo yo

Foto: Internet

Por: Evelyn Sofía Diaz

Cartagena. Las razas opuestas se atraen…A mí sólo me gustan las extranjeras, yo creo que tenemos el chip colonial y vemos a los blanquitos como superiores, yo no sé, yo soy morenito y la verdá, no me gustan las de mi color, dice David, de 28 años, mientras una negra de caderas pronunciadas y un forastero blanco caminan de la mano,  como si tuvieran un imán atraen toda las miradas. Hace silencio por un par de segundos y continúa: también hay muchas mujeres  que están pendiente a los de afuera, se entregan un poco más a ese prototipo del hombre; alto, nariz fileña, blanco. Es viernes, son las 5:30 de la tarde y  la Plaza de San Diego , en el Centro Histórico se convierte en una tertulia multicultural. Antes de irse a otro lado de la plaza, David me  mira y dice entre risas: Tú  eres una morena exótica, a  ello les gustan así, porque eso no se ve por allá.

La noche va entrando, y con ella una especie de magia que se apodera de La Heroica; y aunque en Cartagena todos los días pueden ser de fiesta, los viernes tienen algo  especial. Parece  que todas las calles se quedaron solas, turistas y locales se dieron cita en la  Plaza de La Trinidad y Jhonathan Tello, profesor de inglés Afrocolombiano de 29 años,  es uno de los que más la visita; por ese ejercicio, su manejo de otro idioma y  el carisma propio de los negros, ha tenido gran éxito entre las mujeres de otros países, especialmente Europeas. No quisiera generalizar, pero yo diría que las extranjeras son mejores parejas que las colombianas, a ellas no les importa si eres bajito, negrito, feo o sin dinero, cuando están contigo es porque de verdad te quieren.

Mi amor, espérame un momento que voy a saludar a unas francesas que tenía ratos que no veía; expresó antes de tomarse el último trago  de una cerveza.

Inmediatamente: Con las de aquí es más difícil, hasta para tú acercarte a conocerlas; por ejemplo,  en una rumba si  sacas a bailar a una Cartagenera que no conoces, existe un 80% de posibilidades que  te diga que no, son muy complicadas, con las extranjeras ese mismo porcentaje es positivo. Las Europeas son mejores parejas, pero también son frías e independientes, y me refiero a la forma de querer, ellas no te consultan para hacer la cosas, las Colombianas le prestan más  atención a eso, son más sumisas, a los extranjeros le gusta eso de la Colombianas. No quiero decir que  las de aquí no sean buenas, pero hablo de mi experiencia.

Algo parecido piensa Carlos Barba, comunicador social de 33 años, y quien asegura que tuvo romances con alguna de ellas, las calificó como más liberales, descomplicadas  y sin tantos prejuicios, eso, para él serían algunas de la ventajas que tienen sobre las Colombianas.

Juan Camilo, productor de cine de Bogotá es alto, rubio, ojo azules y nariz respingada, él asegura: Yo  aquí paso por extranjero por mi físico, eso es chistoso porque caigo muy bien a algunas mujeres, pero el encanto me  dura poco, en ocasiones, porque mi bolsillo no puede competir con el de los Europeos, por ejemplo. Mucha Cartageneras  son interesadas, no todas. Pero el sabor y la alegría de esta tierra, no lo encuentro en otro lugar, ni en otras mujeres, las extranjeras son más frías, parce.

Kisy Thime, es  una morena de 28 años de “ curvas peligrosas”,  alegría arrolladora y un “bailao” que conquista, se casó con Adrian Duarte hace, un Español que dice que esas características fueron el motor de arranque de la relación, y aunque tenía referencias de las Colombianas como “buenas mujeres”, quiso comprobarlo. ¡Qué tontos lo que buscan mujeres fuera de Colombia! Ella tiene algo  que no te he podido explicar.

Interesadas o no, buenas mujeres, liberadas o conservadoras, lo cierto es que todos coinciden en que en Cartagena las mujeres tienen algo especial, aunque ninguno sepa con exactitud qué es…

Después de 9 de la noche…

Aquí todos los rubios ojos claros son “ gringos”, sean de donde sean. En las noches de copas no puede faltar una negra “ exagerada”, a la que le sobra trasero, tanto que podría repartirlo…Entre la que no fueron “premiadas“ por la naturaleza. Ese cuerpo Caribe se juntó con la  magia del viernes en un lugar para bailar, y agarró  su pareja; un “ gringo” que de “mover el esqueleto” no tenía idea, todo lo contrario a ella que destilaba puro sabor, sin embargo el  se lanzó al reto y bailó hasta más no poder, sus movimiento eran extraños, y parecía tener dos pies izquierdos, pero eso no importaba, en todo caso ella siempre rió y hasta el final ella lo hizo sentir “ el rey de la pista”. Así eres tú, Cartagena, te sobra lo que a algunos les falta.